Alejandro García Ferrer, el que fuera alcalde de Monóvar de 2019 a 2023, es un enamorado del deporte. Ya estuvo en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 paseando su bandera de España con el nombre de su pueblo: «Monòver» y ahora 12 años después retorna a unos Juegos aprovechando que París está a sólo 1.533 kilómetros de la ciudad de Azorín. Está disfrutando muchisimo y nos hace partícipes de sus vivencias olímpicas.
MIGUEL SANTIAGO RICO. Alejandro García es un deportista nato, jugó al fútbol pero sobre todo se le dio muy bien jugar a tenis. Además de verle participar en la San Silvestre Monovera con mucha frecuencia, siempre nos recuerda en La Sala que él tomó parte hace 45 años en la primera carrera de San Silvestre que se celebró en su pueblo.
García Ferrer ya compareció en Londres con su bandera de España con el nombre de Monòver y ahora se ha desplazado a París, y en este caso lo ha hecho por carretera. Se halla en la capital gala desde el día 24 de julio cuando la selección española de fútbol inauguró el torneo olímpico ante Uzbekistán.
«No sólo he visto en directo la mayoría de deportes, sino que también me gusta estar pendiente a través del móvil de todo cuanto sucede en todas las instalaciones», nos comenta Alejandro. De hecho, García Ferrer está publicando su propio diario olímpico en su cuenta de Facebook, donde recoge sus vivencias olímpicas.
Comentamos con el ex-alcalde de Monóvar lo mucho y bien que se vio su bandera en el maratón de Marcha donde María y Álvaro se colgaron la presea de oro: «Sí, estudié el trazado y me di cuenta que en esa curva se iba a ver mucho y así fue, luego me lo decía todo el mundo, tenemos al pueblo de Monóvar revolucionado por lo mucho que se está viendo la bandera en televisión en diversos emplazamientos olímpicos».
Respecto al ambiente que se está viviendo en estos Juegos, Alejandro nos relataba: «Hay mucho más ambiente que en los Juegos de Londres, españoles hay muchísimos, holandeses, por ejemplo, también., El otro día en la marcha atlética se dieron cita muchísimos seguidores españoles, era una medalla esperada y había un ambiente espectacular».
La instalación que más le ha impresionado es «el estadio de Francia, Saint Denis, donde me encuentro ahora mismo para ver la jornada de atletismo de esta tarde, a ver si hay suerte con el valenciano Quique Llopis. Este estadio es impresionante con cerca de 80.000 personas».
Pero su deporte favorito es el tenis: «Tuve la suerte de ver en directo el Nadal-Djokovic, saqué la entrada para esa jornada sin saber quien jugaba y me llevé una alegría tremenda al comprobar que iba a ver ese partido. Me quedé impresionado porque toda la Philippe Chatrier animaba a Rafa, hubo algún punto de Nadal que estaban un minuto aplaudiendo. He visto jugar en directo también a tenistas como Tommy Paul o a veteranos inolvidables como el nipón Nihiskori, entre otros, además de a las medallistas españolas Bucsa y Sorribes».
Alejandro se lamentaba de no haber podido ver la medalla española del basket 3×3: «No me atraía en principio el 3×3 pero tampoco se esperaba la medalla y luego la verdad es que estuvo genial. Todavía me quedan por ver bastantes finales, culminaremos con la final femenina de baloncesto del domingo».